Salud y paciencia, son mis mejores deseos para todos ustedes en tiempos que comienzan a ser aciagos en cuanto a la economía, y que preveo que lo serán por al menos dos años a partir de ahora.
Me encantaría decir que la caída de la bolsa y del peso sólo afectarán a quienes tengan inversiones en acciones o en fondos, pero lamentablemente, no es el caso. Nos van a afectar a todos, en la medida en que formamos parte de una sociedad que ve a su casi único socio comercial caer en la recesión, lo cual afectará a nuestros paisanos allá, que mandan ya menos dinero, y lo harán aún menos, y a las empresas de aquí, que directa o indirectamente dependen del mercado estadounidense.
Así que quienes tengan empleo, a cuidarlo. A trabajar duro, con eficiencia y responsabilidad, como lo hacen siempre, pero sin aflojar; quienes tengan créditos, a concentrarse en pagarlos y disminuirlos, sobre todo en tarjetas, cuyos intereses son tremendos. Procuremos pagar más del mínimo, y procuremos también guardar en el fondo del cajón más inaccesible a las tarjetas, para evitar incrementar el saldo.
Y bueno. Fuera de eso, creo que tenemos, en lo personal, familiar y comunitario, la fortaleza para salir de esta crisis como lo hemos hecho antes, pero eso no significa que no nos afectará. Como que nos habíamos acostumbrado a una cierta estabilidad. Cuidemos lo que nos toca para que no se nos descarrile el tren.
Puesto que aquí estamos, y esperamos aquí seguir, a sacar los paraguas, las gabardinas y a echarle ganas. No hay de otra. Vamos a demostrarnos a nosotros mismos, que somos más fuertes que nuestros problemas. Contamos con todos. Nos necesitamos. No dejemos que divisiones políticas o ideológicas nos dividan. Es momento de cuidar el país, no a los partidos, que esos se cuidan solos.
Un abrazo,
Enrique Vigil H
Lunes 6 de Octubre de 2008.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Ahora sí, este blog NO acepta comentarios anónimos
Todas las opiniones aquí expresadas son responsabilidad de quien las escribe.